Clara y Raúl, padres de Romina Chirino: «La tenemos presente todo el tiempo»

16/1/2023

«Romi era una hija ejemplar, estudiosa, luchadora, con un corazón tan grande; ella todos los días que se iba al colegio, todavía quedan vecinas que recuerdan que se iba temprano y les golpeaba la puerta o la ventana y les decía: dense una vueltita por lo de mi mamá, que yo me voy a la escuela; había señoras grandes que vivían solas, había una que estaba en silla de ruedas y ella se encargaba de hacerles las compras a todas ellas; a veces les ayudaba a cocinar; era eso, una gran niña, con ese corazón enorme, una gran hija; con la corta edad que tenía iba a trabajar a un negocio; manejaba la computadora como nadie; los fines de semana preparaba alumnas, chicas del colegio».

Van a cumplir 18 años esperando una respuesta. A esta altura solo confían en la justicia divina. La tragedia ocurrió en la localidad de Media Agua, provincia de San Juan. El 26 de marzo de 2005, Romina Chirino, de 16 años, salió a bailar junto a su hermano Raúl para festejar el cumpleaños de una amiga. Cerca de las cuatro de la madrugada, al salir del boliche, un motociclista la atropelló. Al día siguiente murió como consecuencias de las heridas terribles provocadas por el impacto.

El responsable del drama, Ricardo Gómez, alias Piri, se encontraba en estado de ebriedad y la embistió al intentar manosearla. El hombre nunca estuvo detenido. Los tribunales sanjuaninos consideraron que cometió homicidio culposo. Fue condenado a tres años de prisión en suspenso y cinco de inhabilitación para conducir. Sin embargo, siguió manejando e incluso años después embistió a otra persona que estuvo grave. Esta segunda víctima es un hombre viudo y padre de seis hijos.

Clara y Raúl Chirino, los padres de Romina, narran en el testimonio desgarrador de esta nota la experiencia dolorosa que han vivido a los largo de casi dos décadas. Tuvieron que mudarse a otra zona para evitar el contacto con el asesino de su hija, que jamás se hizo cargo de lo que provocó. Además, intentó invertir la prueba. Cuentan con el respaldo de la Asociación Familias del Dolor y la Esperanza, fundada por Guillermo y Lorena, padres de Lautaro, otro damnificado vial de apellido Chirino.