Carina Quevedo, mamá de Juan Ignacio: «Niños y jóvenes deben tomar la posta»
31/1/2023
por Lucio Casarini
«Acá, en Mendoza, todo el mundo sabe qué es una estrella amarilla, qué significa, qué sentido tiene y cómo se multiplicó; podemos llegar a hacer algo por esa familia que se encuentra totalmente golpeada por el shock antinatural de un hecho de tránsito; descubrimos la impunidad que tienen algunos sectores de mayor capacidad económica para pagar una fianza; cuando el exgobernador impulsó el endurecimiento de penas y también altas multas en la provincia, nosotros no estuvimos de acuerdo, porque ese refuerzo de castigos no había sido trabajado correctamente: según la zona, el vehículo, el poder adquisitivo; hoy se comete una falta grave y le retienen el vehículo a una persona que no tiene manera de pagar la multa y pierde el coche, que tal vez es su instrumento de trabajo».
Carina Quevedo es autora de la primera estrella amarilla de la provincia de Mendoza. La plasmó en memoria de su hijo Juan Ignacio Mayore, que tenía 17 años cuando el 18 de octubre de 2017 perdió la vida en un hecho vial. El joven venía de acompañante en un auto que manejaba un amigo. El coche salió de control en una curva muy cerrada e impactó dos pivotes de hierro. Uno de los hitos metálicos se incrustó justo donde Juani estaba sentado. Falleció de forma instantánea.
Ella logró poco a poco sobreponerse y en la actualidad es presidenta del grupo Estrellas Amarillas Mendoza, una de las entidades ciudadanas más activas e influyentes del distrito. Junto a los demás miembros realiza unas 20 nuevas pintadas por mes. Suman aproximadamente 1200 en todo el territorio provincial. Denuncian que el Estado permanece ausente. Reclaman, por ejemplo, un programa de asistencia a la víctima. También que el sistema educativo incorpore contenidos y medidas concretos.
La mamá de Juan Ignacio confiesa en el testimonio de esta nota que ha vivido un torbellino de sucesos inexplicables y antinaturales. Ella y el padre de sus hijos, Leonardo, tuvieron cuatro varones y dos nenas. A Juan Ignacio, el mayor, lo siguen Agostina, Melisa, Nahuel, Luciano y Diego. Hasta la tragedia fue ama de casa de tiempo completo. Impulsada por el dolor, se ha convertido en una activista civil incansable. Uno de los desafíos urgentes es la Ley de Alcohol Cero al Volante.